La red Ethereum fue creada a finales de 2013 por el programador Vitalik Buterin. Fue financiada entre julio y agosto de 2014 y finalmente se puso en marcha el 30 de julio de 2015. Ethereum funciona de manera similar a la cadena de bloques Bitcoin, es decir, que es una red de ordenadores y validan las transacciones a través del consenso mayoritario. Esta acción se denomina, al igual que en Bitcoin, minería. Centrémonos en sus principales diferencias tecnológicas:
Ethereum es una plataforma de software abierta basada en la tecnología blockchain que permite a los desarrolladores construir e implementar aplicaciones descentralizadas (dApps). La diferencia más importante con Bitcoin es que en su red se implementan “contratos inteligentes” o smartcontracts. Que son protocolos informáticos que verifican que se han producido determinadas condiciones pactadas previamente en la red y ejecutan automáticamente el acuerdo digital al que se ha llegado. Es decir, es la versión digital y automática de los contratos tradicionales. Como podrás imaginar las aplicaciones de este tipo de tecnología son innumerables y de hecho actualmente muchas de las empresas más importantes del país están desarrollando contratos inteligentes en sectores muy diversos.
En el proceso de minado la mayor diferencia es que en el proceso de validación los mineros de Bitcoin son compensados por sus recursos con bitcoins y los mineros de la red Ethereum son compensados con ethers. Este proceso de minado requiere potencia informática, y esa potencia no es gratuita. Ether es la solución al problema del pago y debe considerarse como un combustible en la red de Ethereum. Muchas monedas digitales, como bitcoin, tienen un número máximo de tokens o monedas que se pueden extraer. El ether no tiene un límite de este tipo por lo que se pueden generar, de momento, a demanda. Esto es lo que comúnmente se conoce como “generador de inflación”.
De forma muy esquemática podemos decir que los tokens son esencialmente contratos inteligentes que hacen uso de la cadena de bloques Ethereum. Fruto de esos tokens nacidos en la red de Ethereum que se pueden comprar, vender o intercambiar, tenemos el ERC-20. El ERC-20 se ha convertido en el estándar técnico utilizado para todos los contratos inteligentes en la cadena de bloques Ethereum. En la actualidad es el protocolo más popular de generación de tokens. El número aproximado de tokens compatibles con ERC-20 está alrededor de 250.000.
Además de esto añadimos una información que creemos puede resultar de gran utilidad cuando en un Exchange tenemos que identificar diferentes activos. En 2016 en la red Ethereum se produjo un importante hackeo con el resultado del robo de $50 millones en ether. En este momento la red de Ethereum se dividió en dos cadenas de bloques separadas: la nueva versión se convirtió en lo que hoy conocemos Ethereum (ETH) con el robo revertido, y la red original que continuó como Ethereum Classic (ETC). En estos momentos cotizan de forma independiente por lo que no es lo mismo comprar un ETH que comprar un ETC.
Para terminar puntualizaremos que en la actualidad Ethereum compite como segundo proyecto del ecosistema, por importancia. Ethereum ha contribuido de manera significativa a la adopción de la tecnología por cadena de bloques (blockchain) en los últimos años gracias al desarrollo de sus contratos inteligentes. Sin embargo, en estos momentos el principal problema de Ethereum es su falta de escalabilidad. Dicho problema está intentando ser resuelto por la comunidad de programadores. En breve podríamos conocer una solución.
Ahora ya conoces un poquito más de uno de los proyectos actualmente más importantes! sigue buceando en nuestro Blog que seguro que encuentras muchas más cosas interesantes.